Como experimentamos los entornos virtuales inmersivos: el concepto de presencia y su medición

Resumen

En este artículo se revisa el concepto de presencia en entornos virtuales inmersivos; es decir, la sensación de estar dentro del entorno virtual indicada por el modo de responder al mismo como si fuera real. La presencia debe distinguirse de otros fenómenos como el compromiso o la implicación. Hay tres condiciones necesarias para la presencia. La primera es un bucle sensomotor consistente y de baja latencia entre los datos sensoriales y propioceptivos. La segunda es la plausibilidad estadística, referente a que las imágenes deben ser estadísticamente plausibles en relación con la distribución de probabilidad de las imágenes en escenas naturales. Un límite para esta condición viene dado por el nivel de inmersión. La tercera es la correlación entre el comportamiento del sujeto y la respuesta del entorno. La presencia se mantiene e incrementa a lo largo del tiempo como consecuencia de la correlación entre, por un lado, el estado y el comportamiento del sujeto y, por otro, las respuestas del entorno, indicando que el entorno responde de forma adecuada a la actividad del sujeto. Se concluye con una discusión de los métodos que se pueden emplear para evaluar la presencia y se recomienda para ello, en particular, la comparación con datos obtenidos sobre el terreno; es decir, la comparación entre las respuestas del sujeto ante estímulos virtuales y las respuestas ante los correspondientes estímulos reales.