Parc del Centre de Poblenou, una crítica urbanística

Resum

El ayuntamiento aprobó en los 90 el “Pla Especial per a l'obertura de la Diagonal des de les Glòries fins el Besòs”, en el que estaba prevista una gran zona verde sobre el trazado de la Diagonal y de Pere IV. La urbanización de la avenida duró largos años y acabó coincidiendo con otro plan urbanístico: el conocido 22@. Ambos planes completaban la transformación urbanística del sector de levante de Barcelona: el primero extendiendo la malla urbana del ensanche hasta el Besós y el segundo dotando de nuevos usos y de una nueva centralidad a un barrio hasta entonces de periferia. Faltó una visión unitaria e integrada de ambas estrategias urbanas. La intersección de la Diagonal con Pere IV, emplazamiento previsto para el Parc del Centre, correspondía de forma natural al nuevo polo articulador de la zona, circunstancia que pasó inadvertida por los urbanistas, los cuales mantenían visiones fragmentadas y ajenas al relieve social. Incapaz para percibir el valor estructurante de las tramas históricas del patrimonio industrial, y con una al menos aparente falta de ambición, el ayuntamiento perdió la oportunidad de crear un espacio público de calidad, acabando la obra del arquitecto Jean Nouvelle en un inesperado archipiélago de pequeñas islas rodeadas de muros vegetales. Todo ello en detrimento de un espacio urbano que por su posición privilegiada merecía un rol de máxima centralidad.