Escuchar, sentir, mirar. Reflexiones en torno al acompañamiento a las mujeres que han sufrido violencia machista

Resumen

Parto de mi experiencia biográfica relacionada con las vivencias en un pequeño pueblo rodeado de naturaleza, de la relación especial con mi abuela materna, siempre dispuesta a escucharme, las puertas abiertas de mi casa familiar, la acogida de mi madre a las mujeres que se acercaban a conversar con ella, que han guiado mi comprensión y acercamiento hacia las mujeres que sufren la violencia de los hombres. La complicidad y los saberes compartidos en Tamaia, viure sense violència, las enseñanzas recibidas en diferentes disciplinas y la confianza de tantas mujeres han dado medida a la paciencia, la escucha, el amor y la disposición a acoger el sentir del cuerpo y el alma como herramienta terapéutica imprescindible en la reparación del daño causado por la desmesura en el dar. Las genealogías y las enseñanzas de mujeres con las que he compartido mi experiencia me han nutrido y acompañado en la tarea de promover acciones políticas encaminadas a vivir vidas libres de violencia machista.